Boracay es una islita en el medio de las Filipinas. Todo el año hace una temperatura excelente. Y la estación de lluvias, asusta más por el nombre que por lo que te puedas mojar. Son normales los chubascos repentinos de una o dos horas, después de éstos, es muy normal que se despeje el cielo y el día se convierta en un día ideal para pasar en la playa.
Siendo la Meca del Kitesurf y uno de los mejores puntos para realizar submarinismo, es uno de los principales enclaves del turismo internacional en las Filipinas. No refleja para nada la realidad de este archipiélago. No se respira la pobreza que nos podemos encontrar en otros puntos de este país. Aún así la seguridad desde que coges el ferry que te acerca desde la isla más cercana es máxima. Lo que crea un clima de libertad ideal para olvidarte de todo y hacer que tu única preocupación sea el disfrute. Su principal atractivo son las playas de arena finísima y blanca, flanqueadas por palmeras, que en el atardecer atraen como la miel tanto a los habitantes de Boracay como a los turistas llegados de todas partes del mundo. En mi opinión, la cosa más bella que mis ojos han visto...hasta que descubrí los amaneceres. Una explosión de miles de colores, donde no hay un día igual. Donde hay días que puedes escuchar las mismas exclamaciones que habrás escuchado al ver unos buenos fuegos artificiales. Aparte de la diversidad que la Naturaleza nos ofrece, esta bonita isla te ofrece de TODAS las facilidades que se te puedan pasar por la cabezas, cientos de restaurante, tanto internacionales como locales, centros comerciales, mercados locales, pubs, bares, discotecas, centros de actividades deportivas, hoteles, lavanderías, tiendas exóticas y mucho más que ya profundizaré más adelante. Yo la denomino "La Isla Resort", donde por unos pocos pesos sales comido, bebido y bien a gusto. Pero de todo ésto también profundizaremos más adelante. :)
